Escrito por: Por: Jen Sánchez
SANTO DOMINGO: – El presidente Luis Abinader ha logrado nuevamente la victoria al ganar las elecciones del pasado 19 de mayo, confirmando así las predicciones de las encuestas y demostrando su fuerte liderazgo tanto a nivel nacional como con otros líderes latinoamericanos. Abinader, quien en su primera campaña promovió su eslogan «el cambio va», ha reafirmado su compromiso con las reformas y mejoras implementadas durante su primer mandato (2020-2024), a pesar de los múltiples desafíos enfrentados, como la pandemia y una economía deteriorada por la gestión anterior.
Durante su primer período, Abinader se enfocó en la estabilización económica, atrayendo más turistas y reformando instituciones clave. Logró una considerable recuperación económica y un incremento récord en el turismo junto al ministro David Collado. Además, cumplió con su promesa de aumentar los salarios de la policía y ampliar la cobertura del seguro de salud Senasa, beneficiando a más de un millón de dominicanos con un seguro subsidiado y cobertura completa. Estas acciones para esta segunda campaña reforzaron su lema «el cambio sigue», destacando su capacidad para cumplir con sus promesas y generar resultados tangibles.
En el ámbito internacional, Abinader es uno de los líderes más respetados en Latinoamérica, conocido por su lucha contra la corrupción y su intención de dejar un legado significativo en la República Dominicana. Para el nuevo período 2024-2028, planea culminar la reforma policial e introducir nuevas reformas, aquellas que considera necesarias para el crecimiento y desarrollo de una nación y continuar con el compromiso de construir un país diferente para concretizar y materializar el cambio.
Ahora bien, entiendo que en esta nueva etapa, el presidente debe considerar diversos factores económicos, políticos y sociales para que un país pueda vivir lo más cómodo posible en términos económicos y sentirse satisfecho con este nuevo mandato, como por ejemplo en los económicos:
1. Mantener la estabilidad económica, en este caso, la inflación controlada, moderar los altos costos de las viviendas tanto para renta como para compra, baja tasa de desempleo y un crecimiento económico sostenido.
2. Necesitamos contar con una diversificación económica, es decir, no sólo depender del séctor turismo, sino también hacer crecer a otros sectores para reducir vulnerabilidades.
3. En cuanto a infraestructuras, hemos logrado muchas cosas, pero también seguimos fallando en otras importantes. Necesitamos buenas carreteras, un sistema de transporte menos agobiante y más eficaz, más acceso a internet, energía eléctrica y agua potable.
4. Capacitación y educación: No necesitamos más planteles escolares sino hay una educación de calidad que prepare a la población para los trabajos del futuro. Todavía tenemos grandes deficiencias con los profesores, no quiero utilizar el término maestro porque implica una vocación adicional que ya casi está completamente extinguida, pero sería bueno convertir nuevamente a los profesores en maestros.
5. Salud pública: todavía hay personas que mueren en las emergencias de las clínicas por un tema dd seguro médico o por falta de un depósito que NADIE tiene en su bolsillo en ese momento. Entonces necesitamos un sistema de salud accesible y eficiente que cubra las necesidades de la población y que el restablecimiento de salud de una persona sea primero y lo más importante antes de pensar en la parte económica. Salvar la vida de un paciente debe ser primordial ante cualquier otra cosa que requiera la clínica u hospital.
6. Seguridad social: sistema de pensiones decentes y dignas para envejecer y ayudas sociales que protejan a los más vulnerables.
Además de los factores económicos, es esencial mejorar varios aspectos sociales:
1. Calidad de Vida: Acceso a viviendas dignas y seguras, seguridad ciudadana y un entorno limpio y saludable son imprescindibles para el bienestar de la población.
2. Cohesión Social e Inclusión: Fomentar la equidad y mejores salarios es vital para reducir la desigualdad y aumentar la satisfacción ciudadana.
3. Fomento de la Identidad, Arte y Cultura: A través de leyes como la de música, mecenazgo y el mantener la ley de cine, la creación de departamentos de cultura en todas las ciudades, se puede fortalecer la identidad y cultura dominicana. La educación artística en las escuelas también es crucial.
Por último, si hablamos de factores políticos necesariamente tenemos que recalcar la necesidad de:
1. De un gobierno eficiente y transparente, instituciones fuertes y cero corrupciones.
2. Garantizar un estado de derecho justo y que garantice los derechos de todos los ciudadanos, manteniendo un sistema judicial complemente independiente.
3. Políticas públicas verdaremente efectivas, que promuevan el bienestar social y económico.
La combinación de estos factores puede contribuir significativamente a que la República Dominicana sea económicamente holgada y que la ciudadanía se sienta orgullosa de un presidente como Luis Abinader que no pretende postularse más para la presedencia de la República.
También debemos de reconocer que Luis Abinader ha mantenido su liderazgo y credibilidad con una visión clara y coherente para el país y ha sido percibido como un líder justo, honesto y ético.
En esta nueva oportunidad, Abinader debe casarse con la gloria y continuar realizando un verdadero cambio en la República Dominicana, rescatando los valores que hemos olvidados, pero que han caracterizado siempre a los ciudadanos dominicanos y volviendo a adecentar el país para un futuro próspero y equitativo.